Gente diversa, con sus vidas, con
sus problemas y circunstancias, con sus ilusiones, sueños, aficiones, penas y
destinos. Un vaivén existencial enmarcado dentro del núcleo dinámico, que se
dinamiza en la vorágine diaria de una ciudad enorme que vibra por sí misma. Son
instantes humanos, tomados en un mismo lugar, en una fracción escasa de tiempo
pero con una profunda inmensidad de momentos y sensaciones… Cada persona
dentro de su propia historia, todas ellas siguiendo sus propios procesos.
Una de las cosas que más me
apasionan es observar la vida a través de la Fotografía y en base ello escoger
un lugar determinado, con un amplio tráfico humano y “cazar” ese vaivén humano
siempre cambiante e irrepetible. Ver el mundo a través del visor y congelar las
realidades humanas, es un proceso de inmersión asombrosa donde los mensajes que
se transmiten son tremendos.