El agua, por si misma, diseña sus propias texturas, planos y formas que, junto a la luz y el movimiento, genera sinfonías mágicas de constelaciones húmedas en permanente estado de fluctuación y cambio. Estas imágenes fueron tomadas (agosto 2020) en Sarnitsa y Dospat, Bulgaria, mientras iba a bordo de un catamarán por las aguas cristalinas del extenso lago. El resultado es pura arte pictórico.